En este momento hay 20 colombianos detenidos en cárceles chinas, la mayoría de ellos por cargos relacionados con el narcotráfico. Un grupo de colombianos residentes en China, liderados por la empresaria Viviana Cadavid y la administradora Ana María Campo, se ha dedicado a recaudar fondos para mejorar sus condiciones de detención. Por medio de esta iniciativa privada con fines humanitarios han movilizado a la comunidad colombiana para donar libros, revistas, diccionarios, cursos de mandarín y otros implementos útiles para la vida en la cárcel. China Files los acompañó durante un almuerzo para recaudar fondos en el restaurante brasilero Alameda de Beijing el domingo pasado.
“Hay que reconocer que estas personas faltaron a las leyes chinas y por esta razón se encuentran en la cárcel pagando su error. Sin embargo, no podemos olvidar que son seres humanos, que en la mayoría de los casos actuaron por ignorancia y necesidad, y que merecen tener una vida digna mientras cumplen su pena”, señala Cadavid, una empresaria antioqueña de energías renovables residente en Beijing desde hace un año y medio.
La idea del iniciativa le vino a Cadavid por razones familiares. “Desde que éramos chiquitos, mi abuela nos mandaba con sancocho y aguapanela para los presos en Copacabana. Yo crecí con esa visión de que hay que ayudarles a ellos también”, cuenta Cadavid, que organizó la recolecta en torno a un banquete con bandeja paisa, cazuela de mariscos, postre de tres leches y otros platos colombianos conceptualizados -por un chef brasilero- específicamente para la ocasión.
A la recolecta de las boletas del evento sumaron las donaciones particulares y los buenos resultados de una subasta silenciosa de diferentes artículos -vestidos, vino, productos de belleza, anchetas con productos colombianos- que habían sido donados por la propia comunidad.
“No es un evento político, sino humanitario. Nosotras no estamos en contra de las leyes chinas, sino que queremos ayudar a estas personas que están tan lejos de sus familias para que tengan así sea una distracción”, dice Cadavid. “El error que ellos cometieron ya lo están pagando. Uno puede darles ese apoyo y eso puede a ayudar a darles otras oportunidades, así estén dentro de la prisión”, añade Ana María Campo, otra de las organizadoras.
La mayor dificultad radica en que los detenidos están dispersos en varias cárceles de Beijing, Shanghai y Guangzhou. Cada una se rige por reglamentos distintos: una de ellas no permite el ingreso de alimentos, otra no permite las películas, otras son más difíciles con los libros. Pero al final, explican, cada uno de los detenidos tendrá la posibilidad de recibir al menos un par de esos artículos.
“Nosotras vamos a consignar el dinero recaudado en la cuenta bancaria de cada uno de los detenidos. Ellos reciben unas tarjeticas de donde les van descontando lo que compren de la tienda de la cárcel, como leche en polvo, azúcar, cobijas o artículos de aseo personal”, cuenta Ana María Campos.
Parte importante de la campaña busca dotar a los detenidos de herramientas que puedan estimular su mente y mejorar sus relaciones sociales en la cárcel, debido a que la mayoría de ellos no habla sino español. Por eso, con el lema de “leer libera”, han reunido todo tipo de libros desde García Márquez y El mundo de Sofía de Jostein Gaarder hasta textos filosofía y crecimiento personal. Y diccionarios mandarín – español, por supuesto. Se trata de donar “un libro que lo haya hecho soñar a uno y compartirlo con una persona que perdió su libertad. Que puedan, por medio de estos libros, salirse de su cotidianidad e invertir su tiempo en algo bueno”, señala Cadavid.
Todos los artículos y libros serán entregados a ellos por la Embajada y el Consulado colombianos, que no participan de ninguna manera en el evento y que servirán únicamente como facilitadores para enviar el material recolectado.
La idea, sin embargo, de los organizadores no se limita a mejorar la situación actual de quienes ya están detenidos, sino a contribuir en la labor de prevención. “Queremos crear conciencia sobre el problema. La idea es además hacer campañas de educación para que en Colombia se entienda la gravedad de las penas en China para este tipo de delitos”, señala Campo. Y, si la idea funciona, señala Cadavid, ¿porqué no ampliarla para todos los latinoamericanos?
Si le interesa colaborar
Todavía se seguirán recolectando libros, revistas y películas para los detenidos colombianos. Los objetos que más necesitan son libros, revistas, películas y muy particularmente diccionarios chino – español. No se permiten libros que traten sobre violencia, sexo o política. De la misma manera, sólo se permiten películas de género romántico y comedia.
A su vez, el dinero recaudado será depositado en las cuentas bancarias de cada uno de ellos, que utilizan para comprar sus implementos de aseo (shampoo, cepillos de dientes, crema de dientes, jabón), alimentos (azúcar, leche en polvo) y ropa (ropa interior, cobijas).
Si usted quiere realizar una donación o enviarles un mensaje puede contactar a Viviana Cadavid o Ana María Campo, a los correos vivianacadavid@gmail.com y annacampo@hotmail.com. O puede escribirnos a info@china-files.com, que nosotros nos encargaremos de ponerlos en contacto.