– Nueva ley china aprieta las tuercas a las ONG
– Persiste fuga de capitales en el mercado chino, pero menos que en el 2015
– India concede (y después cancela) visa a líder uigur bajo presión de Beijing
Nueva ley china aprieta las tuercas a las ONG
El nuevo proyecto de ley para las ONG en China, que según Xinhua será brevemente sometida a votación por una comisión legislativa especial, indica mayores controles por la policía nacional, además de reglas más severas sobre el aspecto financiero. Bajo las nuevas estipulaciones, la policía podrá decidir cuáles ONG están involucradas en operaciones de “subversión del estado” y “separatismo” y las pondrá en una “lista negra”. Por otro lado, disminuirá algunas restricciones sobre permisos de operación (extendiendo el periodo actual de cinco años). Serán también menos estrictas las leyes sobre cuántas oficinas puede tener una ONG en el territorio nacional.
Según expertos consultados por el South China Morning Post, la nueva ley reflejaría el enfoque del gobierno Xi ante las organizaciones no gubernamentales. La estrategia balancea la represión de ONG “fastidiosas” con la concesión de más libertad a ONG consideradas inocuas. La ley llega después de meses de medidas represivas hacia empleados chinos y extranjeros de las ONG en operación en la República Popular, especialmente las que están involucradas con derechos humanos.
Persiste fuga de capitales en el mercado chino, pero menos que en el 2015
Según cálculos publicados ayer por el Instituto para la Finanza Internacional (IIF), en el 2016 China verá una fuga de capitales de un valor total de 538 mil millones de dólares.
Es una respuesta por parte de los inversionistas a la desacelaración del crecimiento del PIB chino, que en el 2015 marcó el peor resultado de los últimos 25 años. Comparadas con las tendencias que surgieron en el 2015, las cifras son de todos modos alentadoras. El año pasado, el IIF calculó que la fuga de capitales fue de 674 mil millones de dólares.
India concede (y después cancela) visa a líder uigur bajo presión de Beijing
Dolkun Isa, disidente uigur musulmán residente en Alemania y presidente del Congreso Mundial Uigur, debió haber participado en una reunión interreligiosa en Dharamsala, India, desde el 30 de abril hasta el primero de mayo, entre otros invitados importantes como el Dalai Lama.
La visa para India, inicialmente concedida a Isa por las autoridades de Nueva Delhi, fue cancelada después de protestas por parte de Beijing. La República Popular considera a Isa un terrorista, y acusa a su organización de promover violencia dentro de la comunidad uigur en China.
En un comunicado, Isa manifestó sentirse “desilusionado” por la decisión del gobierno indio.
[Crédito foto: nbcnews.com]