Sofía Llanos es una diseñadora colombiana que llegó a China hace seis años y comenzó una exitosa marca de accesorios. Hoy exporta sus creaciones desde China a Europa y América Latina, y sueña con conquistar el mercado chino.
El primer accesorio que diseñó fue un anillo, enorme, una bola gigante. Se parecía a un huevo plateado. Se vendió muy bien. El protagonista era sin duda el material (acero), su brillo…
Desde entonces, sintió que era lo suyo. Ese metal maleable y noble.
Siempre supo que se dedicaría a una vocación relacionada con la estética. Llegó a pensar que sería maquilladora profesional: solía pasar largas horas agotando el botiquín de su madre, cuando era niña. Años más tarde, se mudó desde la ciudad de Bucaramanga y comenzó sus estudios de diseño en la Universidad Arturo Tejada de Bogotá.
Los estudios iban bien, todo iba bien. Y una tarde su novio le dijo que su deseo de ir a China, tantas veces evocado, se podía hacer realidad. Y él partió. Y fue él quien la convenció de que ella también debía instalarse en China. Después de unos años de estudiar chino, se convenció de que debía comenzar su empresa desde China. La cercanía con los fabricantes y el clima de emprendimientos que vivía en el país le parecían ideales. La elección del material, el acero, fue otro de los motivos. Tenía todo por delante. Había que ponerse a trabajar.
¿Cómo eligió el acero como elemento principal de sus creaciones?
Hace mucho que tengo curiosidad por el acero, desde que estaba en el colegio. Siempre me gustó mucho comprar anillos grandes y encontré la marca suiza de relojes Swatch, que también tienen una línea de joyería, donde todo lo fabrican en acero. Me impresionaba que la marca lograba tener un diseño súper interesante y a la vez mantener un precio razonable. Cuando llegué a China, tuve la oportunidad de visitar fábricas ya buscando la posibilidad de empezar el negocio. Me di cuenta de que acá hay fábricas muy especializadas y muy buenas en lo que hacen. Esta situación me daba la oportunidad de empezar a crear sin intermediarios, directamente con la fábrica.
¿Cómo comenzó la producción?
Empecé a finales del 2009, sacando uno o dos anillos. He ido creciendo lentamente, tal vez por falta de capital, pero cada vez el negocio es más sólido. Me encuentro en un punto en el que hay un poco más de reconocimiento en Colombia de la marca, y eso ayuda a que crezca.
¿Cómo se inspira para hacer los diseños?
La idea de mi marca es ofrecer una joya, un accesorio muy fácil de combinar, con calidad extraordinaria y a un buen precio. Mi fuente de inspiración es la clientela que quiere usar mis piezas. Qué es lo que quiere una mujer internacional, una mujer que no tiene miedo de expresarse, a destacarse y a jugar un poco con la moda, que es un medio de expresión y una forma de divertirse
¿Ha tomado un poco de la estética china para sus trabajos?
Nunca he tomado la inspiración del país para sacar mis joyas, pero sí mi experiencia internacional. Este tiempo viviendo afuera me ha ayudado muchísimo en la parte de diseño e inspiración. El mercado de la joyería acá es muy distinto al occidental. En China, las mujeres recién están empezando a usar cosas de joyería. Muchas de ellas incluso no tienen las orejas perforadas.
En su página hay una variedad de productos, ¿dónde vende y quiénes son sus principales compradores?
La idea es que sea una tienda virtual muy internacional, que gente de cualquier rincón del mundo se sienta identificada y pueda ordenar. Los envíos son gratis a todo el mundo. Pero he tenido más compras en Colombia tal vez por el despliegue de publicidad que ha tenido la marca allá. Tengo muchas ganas de entrar al mercado online de los Estados Unidos también…
¿Cómo es el proceso de posicionarse como diseñadora de joyas en China?
Entrar al mercado asiático es otro rollo diferente al mercado occidental. Tengo fe que en el mediano plazo pueda entrar en este mercado con tan grande potencial. Pero el posicionamiento de cualquier marca toma tiempo e inversión. Pero espero dentro de poco poder arrancar…
China tiene un gusto muy particular en cuanto a moda. ¿Cómo se pueden insertar sus diseños ahí? ¿Los ajusta o, al contrario, maneja un diseño de corte internacional?
Siempre tengo muy presente la mujer para la cual diseño así que, indudablemente, si lanzo una colección que también se va a vender en China pensaré también en esta futura cliente. Pero es muy cierto que mi perfil de cliente es una mujer internacional, que va con las tendencias mundiales, pero tiene un sentido propio de estilo. Así que creo que la clave es encontrar un balance para que las clientes asiáticas se sientan identificadas sin perder la esencia de Sofía Llanos.
¿Qué ventajas tienes al estar en China?
La ventaja ha sido la oportunidad de tener acceso a fábricas muy buenas y especializadas en el tema de joyería en acero. Me permite mantener un precio final justo, pues trabajo directamente con estas fábricas.
En China controla directamente la selección de materiales y diseños. ¿Ha descubierto algo en su proceso creativo en China que no hubiera encontrado si no fuera porque está acá?
Sí, yo controlo muy de cerca todo el proceso. Las fábricas son muy especializadas, así que ellas trabajan únicamente con acero. Yo proporciono el diseño y me encargo de que el producto final sea lo que tenía en mente. La visión que me ha dado vivir por fuera, especialmente en China, es mucho más amplia y abierta. Estoy convencida de que la experiencia en general me ha hecho una mejor persona y diseñadora.
¿Cuáles son los diseñadores que más admira?
Hoy en día es muy fácil seguirlos a todos. Las redes sociales le permiten a uno eso. Yo sigo de todo un poco, pues para el negocio es clave ir con la tendencia. También hay que estar pendiente de qué es lo que los grandes diseñadores están haciendo, para saber qué es lo que las clientas van a querer tener. Me gusta muchísimo Lanvin, una casa de modas francesa que se divierte mucho con sus diseños tanto en la ropa como en los complementos. Otra marca italiana que me agrada es Marni, aunque su estilo es diferente al que yo hago (porque mezcla materiales), pero la estética me gusta mucho.
¿Tiene diseñadores asiáticos que le gusten en especial? ¿Qué es lo que más le gusta de cada uno?
Me gusta mucho el trabajo de Jason Wu, nacido en Taiwan, pero educado en occidente. Tiene diseños divinos en otra de las corrientes de la moda que me más me gusta, la alta moda o celebración (vestidos de fiesta, novia, coctel, etc). También admiro el trabajo de Jimmy Choo en la industria del calzado. Logra en cada colección lanzar un diseño nuevo y diferente a lo anterior, pero aún así logras reconocer que es un Jimmy Choo, lo cual es muy difícil de hacer, a decir verdad, en este ejercicio de innovación que es la moda.
Actualmente, ¿cuál es la tendencia respecto a las joyas?
En inglés la tendencia se llama Stacking, que quiere decir poner unos sobre otros y consiste básicamente en mezclar. Ahora, todo viene en tamaños más pequeños (se usan los brazaletes más delgados, por ejemplo), con la finalidad de poder usar muchos a la vez. La idea es incentivar al cliente a que se divierta un poco, jugar con los colores, que salga un poquito del cuadro de que los brazaletes y el resto de accesorios sean del mismo color.
Hay una nueva tendencia de incluir en los accesorios las últimas tecnologías (relojes con wifi, brazaletes con chips…) ¿Qué le parece a usted?
Incluir nuevas tecnologías me parece interesantísimo. A veces, el proceso o el producto final pueden ser muy innovadores si uno se arriesga un poco a salir de lo convencional. En un futuro mediano quisiera integrar algo de impresión en 3D, me parece increíble que ya sea tan fácil construir algo, desde tu casa…además me llama mucho la atención el look final de una joya con acero y plástico. Creo que puede ser muy divertido.
¿Cuál es su pieza preferida, de todas las que ha diseñado?
Me siento muy orgullosa de una pieza que ha tenido mucho éxito recientemente. Es un collar grande, una cadena gruesísima. Se llama el collar Onkos.
Sus accesorios llevan nombres muy sugerentes, ¿cómo los escoge?
El proceso es bastante fácil. Busco el nombre en griego del nombre del objeto en que me inspiro para diseñar el producto. Como tengo piezas muy geométricas o literales, es bastante fácil. La idea es que suene más bonito y diferente.
¿Qué estilo de ropa va mejor con sus accesorios?
Creo en el poder infinito de los accesorios para complementar y realzar una imagen pero, para mi, idealmente un buen par de jeans, una camiseta blanca, ¡y muchos accesorios de Sofía Llanos! En conclusión, usar básicos y obtener diferentes resultados jugando con los accesorios.
Reconoce distintas etapas dentro de su creación? Suponemos que el descubrimiento del acero como material principal significó una revolución para usted.
Sí, definitivamente el material para mi es fundamental, desde mucho antes de iniciar mi línea de joyería ya me gustaba y fue una revolución haber tenido la oportunidad de entrar en contacto con fábricas especializadas. Dentro del proceso creativo hay varias etapas. Cada vez intento organizarlas más, sobre todo por el tema del "negocio" como tal. Siempre surgen muchas ideas en la cabeza, después empiezo a organizar las ideas, la parte de edición es súper importante, edito las ideas, él número de referencias y sus variaciones, esta parte es vital también, por presupuesto. Después, se inicia el proceso de fabricación de muestras o prototipos A veces hay cambios sobre la marcha y, una vez se aprueban las muestras, empieza la fabricación que toma de 20 a 35 días.
Los accesorios son utilizados casi exclusivamente por mujeres, ¿a qué se debe? ¿es posible imaginar una línea para hombres?
Esto está cambiando. Hoy en día los hombres están perdiendo la vergüenza a la hora de mostrar que quieren invertir tiempo, energía y dinero en cómo se ven… personalmente, me gusta que lo hagan. Por esa razón lancé una mini colección que quiero reforzar pronto para hombre, que incluye Money Clips, llaveros, mancornas (además el acero es el material ideal también para los hombres por su resistencia), y tengo planes de diseñar algo en piel y acero(brazaletes) para ellos.
¿Qué oportunidades ve para el diseño latinoamericano en China?
Hay un potencial muy grande por explotar. En China, el poder adquisitivo es altísimo y hasta ahora la gente está buscando y encontrando su estilo propio. Todavía hay mucho trabajo por hacer acá. Falta que la gente en China entienda que estilo no es sinónimo de marca de lujo o que no es proporcional a la suma de dinero que gastes en algo. Es como te expresas, el estilo es tu esencia y perdura a través de las temporadas… así que en ese camino que tienen por recorrer lo ideal es brindarles opciones. Ojalá una de esas opciones sean las joyas de Sofía Llanos.
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