[Chineando] en el edificio horizontal de Steven Holl en Shenzhen

In by Simone

Parece que en los últimos años nos hemos sumergido en una carrera por construir rascacielos cada vez más altos. Uno por uno se han ido superando los récords en pie: las Torres Petronas, el Taipei 101, el Shanghai World Financial Center y finalmente -sin dejar muchas opciones de competir- el Burj Khalifa en Dubai. Y justo en esos momentos Steven Holl construye el Centro Vanke, un edificio completamente horizontal en Shenzhen. “Chineando” en uno de los edificios más originales de la arquitectura contemporánea china…
A 45 minutos del centro de Shenzhen, a orillas del delta del Río Perla, surge como un pulpo. Se trata de la última creación del arquitecto estadounidense Steven Holl: el Centro Vanke, una construcción rectilínea que se extiende desde un tronco central como las ramas de un arbusto, permitiendo el surgimiento de parques, espacios verdes y espejos de agua a sus pies.

El edificio, construido por el prestigioso profesor de la Universidad de Columbia y reconocido como uno de los mejores arquitectos de instalaciones universitarias en el mundo, cuenta con tres secciones claramente distinguibles. En un extremo, con vista al mar, se encuentra el complejo de oficinas. El tronco central corresponde al complejo de apartamentos y la rama lateral a un hotel. Y bajo el todo un mundo subterráneo: sala de convenciones, salones de reuniones, restaurantes, un teatro…

Al elevarse por encima del suelo -sostenido por doce columnas estructurales- el edificio no solamente se convierte en parte del paisaje, sino que crea una amplia gama de espacios públicos que lo convierten en un lugar de encuentro y tranquilidad para sus ciudadanos. Al final, increíblemente, el espacio plantado del complejo es exactamente el mismo que existía cuando el lote estaba vacío.

Antes que nada, Holl y su equipo querían hacer un edificio de diseño sostenible, con tecnologías como reciclaje de aguas grises, recolección de agua de lluvia, ventanas de persiana sensibles al sol, techos ‘verdes’… Los 1.400 metros cuadrados de placas fotovoltaicas en el techo, por ejemplo, proveen el 12% de la iluminación necesaria.

“Holl ha diseñado un edificio que que empuja a sus usuarios a detenerse y pensar en el mundo que los rodea”, escribió Nicolai Ouroussoff, el crítico de arquitectura del New York Times. “Le ha dado identidad a lo que hasta ahora era una condición urbana sin forma: ese tipo de espacio sin carácter, que no es ni ciudad ni suburbio, que necesita desesperadamente soluciones arquitectónicas. Es una arquitectura que abre las puertas a nuevas posibilidades. Y que pone de manifiesto el por qué el ambiente experimental de China hoy, combinado con genuina inteligencia, puede ser tan excitante”.

En los últimos años Holl ha inaugurado varios encargos en China: el Museo de la Música en Hangzhou y el ultramoderno complejo de apartamentos Linked Hybrid en Beijing. Aún se encuentra trabajando en el Museo Sifeng de Arte Contemporáneo en Nanjing, en el complejo de edificios ‘Porosidad Didivida’ en Chengdu y en el plan maestro Shan-Shui, que creará un complejo turístico de alto nivel en Hangzhou. Mientras tanto se dispone para comenzar su primer proyecto en América Latina: el centro de doctorados de la Universidad Nacional de Colombia, en Bogotá.



  

Fotos cortesía de Steven Holl Architects