La campaña anticorrupción de Xi Jinping ya ha puesto en su mira a varios empresarios y políticos de China. Ayer, fue sentenciado a cadena perpetua la pieza más alta en la cruzada contra “los tigres y las moscas” adelantada por el presidente Xi. A sus 73 años, Zhou Yongkang, antiguo jefe de seguridad de la República Popular de China, fue condenado a cadena perpetua en la ciudad de Tianjin, tras habérsele imputado cargos por soborno, abuso de poder y divulgación deliberada de secretos de Estado, según informó la agencia estatal Xinhua.
Después de un proceso a puertas cerradas, Zhou fue privado de todos sus derechos políticos de por vida y todos sus bienes fueron confiscados, según el veredicto del Corte de Tianjin. El ex jefe de seguridad aceptó los cargos sin posibilidad de apelar.
El proceso contra el ex número 9 del Comité Permanente del Politburó, durante el gobierno de Hu Jintao, comenzó a mediados del 2014 cuando un comunicado emitido por el Comité Central del PCC informó que habían comenzado las investigaciones contra el antiguo zar de la seguridad por supuestas “violaciones graves de disciplina”.
El comunicado del PCC afirmó que se llevaría a cabo una investigación para “evaluar las violaciones de Zhou”, en lugar de decir que se investigaría a Zhou para saber si cometió violaciones.
La condena de Zhou fue una de las más esperadas en el país. Sin embargo, ya habían caído otras figuras políticas importantes en el China. En 2012, Bo Xilai, líder del Partido comunista de Chongqing, fue retirado de su cargo por decisión del Comité Central del Partido, y el año pasado fue acusado por corrupcion Xu Caihou, quien había sido uno de los generales de mayor rango en el Ejercito Popular de Liberación, durante el gobierno de Hu Jintao.
El caso contra Zhou demuestra que el gobierno de Xi Jinping está dispuesto a perseguir a altos funcionarios en su campaña anti corrupción. Incluso a los miembros del Politburó, rompiendo así lo que algunos han llamado un acuerdo tácito dentro del PCCh. Pareciera que, como Mao, considera que "en una montaña no se pueden acomodar a dos tigres".
[Crédito foto: smh.com.au] También puedes leer:
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