El crecimiento de China mantiene el ritmo necesario para lograr el objetivo de crecimiento del gobierno para el año, que es de 7,5%. China se bate entre la necesidad de mantener un ritmo que no exija de un nuevo paquete de estímulo, y su necesidad de reducir la contaminación y la dependencia en la industria pesada.
La economía de China creció 7,5% en el segundo trimestre, y 7,4% de un año a otro, según datos publicados el miércoles por la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
La cifra concordó con las predicciones de los economistas en una encuesta realizada por Reuters, y fue poco más alta que la del trimestre pasado, es decir 7,4%, la más baja en 18 meses. No obstante, la cifra es alentadora en el sentido que por lo pronto mantiene el camino firme para cumplir el objetivo de crecimiento que el gobierno fijó para el 2014, que es de 7,5%.
La agencia de noticias oficial, Xinhua, citó al vocero de la ONE, Sheng Laiyun, que en una rueda de prensa anunció: "La economía de China arrojó un buen impulso de crecimiento estable y moderado durante la primera mitad del año".
"No obstante, deberíamos recordar que el ambiente doméstico e internacional aun es complicado y la economía nacional todavía enfrenta muchos retos", añadió.
La economía de China se halla ante una desaceleración que ha motivado un desembolso de estímulo por parte del gobierno. Si el crecimiento hubiera sido más cercano a 7% para el segundo trimestre, es probable que se hubiera aumentado la cantidad de estímulo estatal. La desaceleración con respecto a años anteriores ha llevado al gobierno a reformar su política económica.
Aunque la industria creció 8,8% de un año a otro para la primera mitad del 2014, el gobierno hace esfuerzos por reducir la dependencia en la industria pesada y la construcción, y por fortalecer el sector de servicios. Por otro lado, la misión de reducir las emisiones de carbono y mantener el ritmo de crecimiento de la economía también supone un reto para los administradores públicos.
La provincia de Hebei, una de las más influyentes en el crecimiento nacional, ya padeció una caída de 4,2% en el primer trimestre con respecto al año anterior. Según Xinhua, el crecimiento de la provincia de Hebei estuvo entre los más bajos de entre todas las provincias.
La provincia de Hebei es aquella que genera la mayor cantidad de contaminación en la ciudad de Beijing, y se ha convertido en uno de los principales objetivos del gobierno en su lucha contra la polución. El primer ministro Li Keqiang dijo el mes pasado que le "declara la guerra" a la contaminación. Impuso un techo al consumo de energía y aumentó el suministro de agua limpia.
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