El Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi manifestó en un comunicado este 3 de setiembre la posición del Gobierno de no interferir militarmente en el actual conflicto armado en Siria. Este conflicto se inició en 2011 como una protesta pacífica en contra del gobierno del presidente Bashar al-Asad y en el transcurso de dos años los enfrentamientos entre el gobierno sirio y los “rebeldes” que conforman diversos grupos armados opuestos a este, se han intensificado de manera tal que se ha convertido actualmente en una Guerra Civil.
China, Rusia e Irán se encuentran en la lista de países que utilizan su poder de veto en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para impedir cualquier ataque militar en Siria, mientras que Estados Unidos, Francia y El Reino Unido avanzan poco a poco en la posibilidad de atacar el país árabe.
China asegura que no apoyará un ataque hasta que un equipo de inspectores de la ONU haya investigado de manera exhaustiva el uso de estas armas químicas contra los civiles, afirma Wang Yi.
También afirma que cualquier interferencia militar iría en contra de la Carta de la ONU e igualmente contra los principios básicos de las relaciones internacionales.
“No deben existir afirmaciones impulsivas sobre el ataque de armas químicas ni tampoco apuntar a un “presunto culpable” como pretexto para tomar una acción militar que podría llevar a agravar la ya inestable situación en Siria. Asimismo la comunidad internacional debe mantenerse a la guardia contra las fuerzas militares que intentan replicar en Siria el modelo que una vez fue ejecutado por Estados Unidos cuando invadió Iraq en 2003 sin un mandato de la ONU”, dice el periódico de tendencia oficialista Xinhua.
China se muestra firme en su posición de proponer a las fuerzas que se oponen a la intervención militar una unión con el fin de prevenir que países como Estados Unidos y El Reino Unido lancen cualquier ataque aéreo contra Siria, pues considera que estarían basados en medidas injustificadas.
Críticas externas
La Canciller de Alemania, Angela Merkel se ha enunciado en contra de la posición al margen que han mantenido tanto China como Rusia y la califica de “lamentable”. Considera que éstos al no sumarse a una postura común frente al conflicto sirio, debilita considerablemente el papel de las Naciones Unidas.
El uso del gas venenoso que dejó 26 muertos y 86 heridos en la ciudad de Alepo, no es algo que debe quedar sin acciones por parte de la comunidad internacional, ha dicho Merkel en declaraciones que publica este sábado el diario Ausburger Allgemeinen.
Lee otros artículos relacionados:
– La explosión del "sueño chino"