El valor universal del palacio de Kublai Khan y los fósiles de Yunnan

In by Simone

Dos nuevos lugares de China fueron declarados Patrimonio de la Humanidad: tanto la legendaria ciudad antigua de Xanadú -construida por el nieto de Genghis Khan- como los fósiles marinos encontrados en las montañas de Chengjiang gozan ahora de estatus universal. Con estas dos nuevas inscripciones, China suma 43 lugares declarados Patrimonio cultural o natural de la Humanidad por la UNESCO, siendo sólo superada por Italia y España.
Xanadú, cuyo nombre se ha convertido en un verdadero mito, fue la capital veraniega del imperio de Kublai Khan y el lugar desde donde se sentaron las bases de la dinastía Yuan. De la legendaria ciudad diseñada por Liu Bingzhong para el gobernante de origen mongol en 1256 no quedan sino las ruinas derruidas de los muros exteriores, perdidas en un rincón de la provincia de Mongolia Interior y en proceso de reconstrucción.

Aunque pocos viajeros occidentales la conocieron, Xanadú capturó el imaginario popular desde que Marco Polo la describió en sus relatos en el siglo XIII. Su nombre, inmortalizado por el poema del inglés Samuel Taylor Coleridge (In Xanadu did Kubla Khan / a stately pleasure-dome decree...), ha dado lugar a una serie de referencias culturales desde el palacio del Ciudadano Kane de Orson Welles hasta la canción del grupo canadiense de rock Rush, sin olvidar un tema de los argentinos Illya Kuryaki and the Valderramas.

Menos conocida que Xanadú pero igualmente significativo históricamente es el sitio de fósiles de Chengjiang, en la provincia de Yunnan. En esta pequeña zona montañosa está preservado uno de las más completos registros del período cámbrico, con miles de fósiles de vertebrados y invertebrados que formaban parte de un ecosistema marino hace 500 millones de años. El sitio, considerado uno de los hallazgos de fósiles más importantes del siglo XX, se encontraba bajo amenaza por la explotación minera, por lo que se busca que la designación de la UNESCO ayude a preservarlo.

 

La reunión del comité de la UNESCO en San Petersburgo estuvo marcada por momentos de tensión gracias a la participación por primera vez de la Autoridad Palestina, que fue admitida como miembro pleno el año pasado y motivó airadas protestas -y la suspensión de fondos- por parte de Israel y Estados Unidos. Al final, la disputa se selló con la inclusión en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Iglesia de la Natividad en Belén, sitio de nacimiento de Jesús, y su designación como “bien amenazado”.

Este año solamente un bien procedente de América Latina fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad la ciudad de Río de Janeiro. No tanto por sus edificaciones, sino por la manera como el entorno natural permitió el diseño urbano que da vida a Río: desde las montañas selváticas que forman el Parque Nacional Tijuca hasta el Pan de Azúcar con su Cristo Corcovado, pasando por su patrimonio artístico y musical.

Además, fueron seleccionados lugares culturales como la Ópera de Bayreuth (Alemania), la ciudad nueva de Rabat (Marruecos), el pueblo fortificado de Elvas (Portugal) o la mezquita Jameh de Isfahan (Irán), y también lugares naturales como la cordillera de los Ghats occidentales (India) o las 750.000 hectáreas de parques nacionales en la triple frontera entre Congo, Camerún y la República Centroafricana.

 

[Fotos de la UNESCO]