Cuidar a un bebé recién nacido nunca es fácil, pero una joven pareja de la provincia de Hunan tiene aún más razón para estar estresada: su hijo nació con 31 dedos. Siete dedos en la mano derecha, ocho en la mano izquierda, 16 entre los dos pies, dos palmas en cada mano, y ni un solo pulgar entre manos y pies. Hong Hong tiene una manifestación poco común de polidactilia, una condición hereditaria, que hace que sus pies y manos parezcan una “flor de loto”, según la agencia estatal Xinhua.
Hong Hong heredó la condición de su madre, y ha sido la consternación de la pareja de trabajadores migrantes. “Nunca hubiéramos pensado que al igual que su madre, heredaría el polidactilia”, dijo el padre Zhou Chenglin a un periodista. La mamá de Hong Hong, que tiene seis dedos en cada mano, se hizo un examen médico especializado en una clínica de Shenzhen, megaciudad al sureste de China, antes de quedar embarazada, y en otra ocasión con una ecografía tetradimensional en otra clínica durante las 20 y 28 semanas de embarazo, tiempo clave para determinar si el hijo heredaría la condición.
Según un artículo de CNN, la polidactilia es bastante común, y ocurre en promedio en uno de cada 1.000 niños. En general, los dedos adicionales son extirpados quirúrgicamente. Según expertos, el caso de Hong Hong es especialmente complicado, no solo porque cada dedo tiene que ser extirpado por separado, sino también porque se tendrán que reconstruir los pulgares en cada mano para que pueda agarrar objetos con normalidad.
La complicada operación tiene que realizarse pronto, a partir de los seis meses de edad, pero antes de que cumpla un año. A pesar de que faltan dos meses antes de que Hong Hong pueda ser operado, sus papás ya enfrentan la pesadilla de tener que financiar el proceso médico indispensable, que podría costar más de 200 mil yuanes (30 mil dólares). Por esto los padres de Hong Hong decidieron contactar a los medios para publicitar la condición de su hijo, esperando encontrar algún modo para financiar las exorbitantes cuentas médicas. Un trabajador migrante, como los padres de Hong Hong, gana un promedio de 2.600 yuanes por mes, según datos de la Administración Nacional de Estadísticas de 2013.
Inicialmente, los padres de Hong Hong buscaron ayuda a través de las redes sociales, esperando poder recaudar suficiente dinero con plataformas de crowdfunding. En un principio tuvieron éxito, recolectando más de 40.000 yuanes, pero después desistieron, según el padre de Hong Hong, a causa de los molestos comentarios sobre la recaudación de dinero en línea publicados por los internautas chinos. Por el momento, la familia piensa regresar a Shenzhen para que el padre pueda seguir trabajando.
Según estadísticas del gobierno chino, más del 95% de los chinos tiene algún tipo de seguro médico. Según Zhang Wei, de la Escuela de Administración Guanghua de la Universidad de Beijing, a pesar de que el gobierno chino ha hecho inversiones de tres billones de yuanes en el sistema médico público desde el 2009, “es irregular y la administración no es ideal”. Según el Wall Street Journal, los desafíos económicos del sistema público hacen que las clínicas dependan de los ingresos de ventas de medicamentos, incentivando a los médicos a prescribir fórmulas innecesarias para sus pacientes.
Los trabajadores migrantes del interior de China por lo general no pueden financiar los altos costos médicos en las ciudades costeras donde trabajan. Habitantes de zonas rurales recibieron mayores ayudas económicas del estado para pagar costos médicos en el 2015, después de que el gobierno expandiera el número de procedimientos para los cuales los pacientes podrían recibir un reembolso del 70%. De todos modos, un estudio del 2015 indicó que solo un tercio (24,8%) de los los trabajadores migrantes tenía acceso a estos beneficios. Y además, como es el caso de los padres de Hong Hong, aunque puedan recibir asistencia financiera del estado si se quedan en sus zonas natales, las oportunidades de trabajo son escasas y muchos están obligados a migrar a las grandes urbes en el este del país.
En el 2010, otro niño con 31 dedos fue operado en la provincia de Liaoning. El procedimiento del niño de seis años fue completado sin complicaciones, según un artículo de Xinhua.
[Crédito foto: Daliulian]
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