Tras una polémica decisión, 23 lugares históricos de Japón, algunos considerados sitios de trabajo forzoso durante la Segunda Guerra Mundial, fueron declarados por la UNESCO como patrimonio de la humanidad.
Un comité de la UNESCO otorgó el estatus de patrimonio de la humanidad a 23 sitios históricos que impulsaron la revolución industrial en Japón durante el Imperio Meiji (1868-1910), entre los cuales se destacan los diques del puerto de Nagasaki y la mina de carbón de Hashima, en la que fue inspirada la guarida de Raoul Silva, el principal enemigo de James Bond en Skyfall.
Sin embargo, la decisión a la que llegó la UNESCO el domingo pasado en Bonn, Alemania, solo se dio bajo la condición de que el gobierno de Shinzo Abe reconociera que siete de los sitios históricos habían sido utilizados como campos de trabajo forzoso durante la ocupación japonesa en China y en la península coreana, que tuvo lugar en la primera mitad del siglo XX.
Fue precisamente Corea del Sur quien pidió reconocimiento a los más de 57.000 coreanos, entre otras nacionalidades, que fueron desplazados de sus hogares, apartados de sus familias, y obligados por los japoneses a trabajar en pésimas condiciones durante la Segunda Guerra Mundial.
A pesar de que Japón siempre había negado que los coreanos fueron tratados como “esclavos” durante la época de la ocupación, tras la insistente presión de Corea del Sur, Kuni Sato, el embajador de Japón ante la UNESCO, reconoció ante todos los miembros del comité que “un gran número de coreanos fueron llevados en contra de su voluntad y obligados a enfrentar duras condiciones de trabajo en algunos sitios durante la década de 1940”.
Además, la representante nipona señaló que se harían esfuerzos para honrar la memoria de las víctimas y prometió que se instalaría un “centro de información” detallando las condiciones a las que eran sometidos los trabajadores coreanos hace más de 60 años.
China también se manifestó frente a la decisión de la UNESCO. Durante una rueda de prensa, Hua Chunying, vocera del ministerio de Asuntos Exteriores de China, dijo que su gobierno estaba al tanto de la situación y que “Japón, a través de acciones concretas, debería ganarse la confianza tanto de sus vecinos de Asia como de la comunidad internacional”.
“Realmente, no se trata de si los sitios históricos son considerados como patrimonio de la humanidad”, le dijo Liu Yangjong, vice decana del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Tsinghua, al Global Times. “Lo importante es la actitud que tome Japón frente a su pasado bélico y si usará o no dichos sitios para honrar su agresión pasada”.
A pesar de las declaraciones de Kuni Sato, todavía existen fuertes tensiones entre Japón y Corea del Sur. Hace meses que se espera una cumbre bilateral entre Park Geun Hye y Shinzo Abe. Sin embargo, Park se ha negado a reunirse con su contraparte nipona hasta que Japón haga mayores esfuerzos para compensar a las mujeres prostituidas por las fuerzas japonesas durante la Segunda Guerra Mundial.
[Crédito foto: viralands.com] También puedes leer:
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