“Mo Yan es un escritor satírico de primer nivel”: investigador y traductor Howard Goldblatt

In by Andrea Pira

Desde hace más de dos décadas Howard Goldblatt es uno de los traductores más respetados del chino al inglés y uno de los mayores impulsores de la literatura china contemporánea en occidente. Hasta el momento este profesor de estudios chinos en Notre Dame ha traducido seis novelas y un libro de cuentos de Mo Yan, incluyendo las próximas a aparecer Muerte de sándalo y POW! Además, tres traducciones suyas -Jiang Rong (Tótem de lobo), Su Tong (Un barco a la redención) y Bi Feiyu (Tres hermanas)- ganaron tres de los primeros cuatro premios Man Asian a la mejor novela asiática. China Files conversó con Howard Goldblatt sobre el Premio Nobel concedido este año a Mo Yan, como parte de una serie de entrevistas con estudiosos de su obra.

Gran parte de la discusión en torno a Mo Yan parece estar relacionada con el hecho de si es un escritor subversivo (con sus novelas mordaces y sarcásticas) o uno servil (por su condición de escritor pagado por el gobierno), dejado poco espacio para otras opciones. ¿Cómo cree usted que interpreta Mo Yan el rol de un intelectual? ¿Qué tipo de figura pública busca ser?

El hecho de que Mo Yan sea o no subversivo depende de qué tipo de subversión hablamos. La mayor parte de las críticas sobre su selección, así como sobre él mismo, giran en torno a dos cuestiones: su estatus “oficial” y su discurso público (o falta de él), incluyendo un apoyo de la disidencia abierta contra el gobierno.

Mo Yan admite sin problemas que es hasta cierto punto un escritor “aprobado”. Pero todos los autores publicados en China lo son, hasta que no lo son más por alguna razón. Reciben su salario y su seguro médico del gobierno, y les es permitido publicar. Él no es más ni menos vocero del gobierno que otros escritores y poetas cuyas obras son regularmente traducidas.

¿Entonces en qué rastros de su personalidad y de su obra podemos encontrar esta subversión?

En 2000, cuando Gao Xingjian ganó el premio, Mo Yan celebró públicamente su selección pese a la objeción por parte del gobierno. Y, como ya es sabido, poco después del anuncio este año, pidió la liberación de Liu Xiaobo.

En Rana, cuestiona la política del hijo único; en el cuento “Un niño abandonado” cuestiona el carácter insensible de la sociedad china; en La república del vino y POW! Reflexiona en torno a la obsesión nacional con la comida (incluyendo las especies raras) y el alcohol; y en Las baladas del ajo, que el Comité del Nobel describió como su primera gran obra, cuestiona el mal comportamiento de los funcionarios públicos y el abuso de la población campesina. Finalmente, en Grandes pechos, amplias caderas el único personaje masculino positivo es un soldado nacionalista. ¿Es entonces subversivo? Definitivamente, sí lo es. Mo Yan es un escritor satírico de primer nivel.

Efectivamente creo que no le interesa convertirse en un intelectual público ni inmiscuirse en las problemáticas de la actualidad, excepto como material para su ficción. Simplemente quiere escribir.


¿Cuál ha sido el aspecto más complejo al traducir a Mo Yan al inglés? Lo preguntamos porque, a pesar de la importancia del español como lengua, está siendo traducido indirectamente a partir de sus traducciones al inglés.

El tono. Además de su genialidad arquitectónica, siempre ha sido su lenguaje rico, diverso y exuberante lo que me ha atraído con mayor fuerza. Y es, por supuesto, casi imposible replicarlo en otro idioma. Pero debemos intentarlo.

Y esto es especialmente cierto en la traducción de Muerte de sándalo, que aparecerá pronto [en inglés], en la que cinco personajes diferentes -desde un campesino hasta un verdugo y un magistrado- narran secciones de la novela, cada uno con un estilo único.

Si te interesó este artículo también puedes otros de literatura:

“Mo Yan se convertirá en un nombre fijo en los libros de texto y los cursos de literatura mundial”: investigador Michel Hockx

Mo Yan, un escritor de sátira sutil cercano al poder

Mo Yan, vida y obra del nuevo Nobel de literatura

¿Podría China ganar otro Nobel de literatura?

Sorgo rojo de Mo Yan, honrando el sufrimiento pasado

Hai Zi, el poeta de los estudiantes en 1989

"Cien años de soledad" en el país de los piratas

Yu Hua, contra la profesión de dentista

El escritor mexicano Sergio Pitol, un puente cultural entre América Latina y China

Escribiendo cartas al silencio: Juan Gelman en Beijing

[Chineando] con la educación “china” de Madre tigre, hijos leones de Amy Chua

[Chineando] con Amor en la ciudad en ruinas de Zhang Ailing

El año de Gabriel García Márquez en China

[Chineando] con el mandarín callejero recopilado por Eveline Chao

El libro de un hombre solo de Gao Xingjian

The noodle maker, de Ma Jian