“El gobierno ve Weibo como una oportunidad, pero también como una fuente de inestabilidad”, entrevista a Jason Q.

In by Andrea Pira

Weibo, es el “twitter” más grande del mundo, y el más controlado. Cuenta con un gigantesco ejercito de censores para vigilar cada post. Para eludir la censura, los usuarios se las ingenian cambiando los caracteres prohibidos por otros homófonos. Muchas veces resulta casi imposible saber que caracter chino va a estar bloqueado en weibo, y muchos menos por qué. Los caracteres de “tocino” junto al de “pelo” están bloqueados porque pueden sonar como “Mao preservado”, entre muchas otras combinaciones. Jason Q -es conocido bajo ese nickname- lleva desde hace años un blog en donde detecta y analiza las palabras bloqueadas. Esa investigación fue volcada en el libro “Bloqueado en Weibo”, publicado en Estados Unidos con gran éxito de ventas.

¿Cómo se inició en este trabajo de monitorear las palabras bloqueadas?

Fui editor literario por unos años, y uno de los libros que publiqué era acerca de la compañía estatal de televisión China (CCTV, por sus siglas en inglés). Me pareció fascinante la manera en que la gente transmitía la información, dadas las limitantes del sistema. Luego, cuando realicé mis estudios de posgrado, una de las clases que más me interesó trataba la barrera entre lo apropiado y lo inapropiado para la audiencia en línea china. Así, empecé a trabajar en un proyecto que me permitía identificar las palabras bloqueadas en Sina Weibo, la red social más importante del país.

¿Cómo accede a esta información? ¿Tiene informantes dentro de Weibo?

Sigo a investigadores y periodistas que tienen esos contactos dentro de Weibo y en la esfera virtual china. Por ejemplo, la página web China Digital Times filtró las instrucciones oficiales de censura del gobierno, conocidas como las Directrices del Ministerio de la Verdad. Pero, más que todo, me baso en mi habilidad tecnológica para recolectar datos, investigar, y analizar para conectar las pistas.

¿Cómo monitorea las palabras?

Portales como China Digital Times están haciendo una fantástica labor identificando las palabras que son bloqueadas en Weibo, pero hasta que empecé el proyecto, nadie había pensado en revisar palabras que no fueran evidentemente delicadas. ¿Cómo íbamos a averiguar cuál es el límite entre lo aceptable y lo inaceptable si solo buscamos palabras que de entrada ya tenían una connotación sensible? Así, lo que hicimos fue tomar la lista completa de títulos en la página de China en Wikipedia (unas 700,000 frases), las introdujimos a Weibo una a una, y miramos si la red social la censuraba. Al final teníamos 500 palabras clave, 150 de las cuales detallo en mi libro Bloqueado en Weibo.



¿Cómo y por qué bloquean las palabras en Weibo?

¡Esa es una gran pregunta! Básicamente, si la palabra que uno está buscando coincide con las palabras de la ‘lista negra’, Weibo no genera resultados. En vez de ello, muestra un mensaje de error que dice: “Debido a las leyes y regulaciones, los resultados de búsqueda no pueden ser mostrados”. Es decir, ellos mismos admiten que están censurando el contenido.

¿Qué tipo de problemas le puede causar la libre expresión en Internet al gobierno?

No creo que sea tanto un problema como una perturbación. El gobierno ve Weibo como una oportunidad, pero también como una fuente de inestabilidad. Lo primero, porque ahora le es más fácil evaluar la opinión pública y pueden identificar temas que necesitan ser resueltos. Sin embargo, Weibo causa gran nerviosismo entre las autoridades chinas por su carácter impredecible. Por ello la controlan tan de cerca.

Desde que inició el proyecto en 2011, ¿cómo ha cambiado la censura en la web china?

Parece que menos palabras están siendo bloqueadas hoy. No obstante, la censura sigue siendo una herramienta muy utilizada y hoy es mucho más difícil de detectar. Sina ha contratado cientos de censores para revisar y borrar mensajes polémicos, y las autoridades chinas también alientan a los usuarios a “no esparcir rumores”. Incluso han recurrido a amenazar a ciertos blogueros con cárcel si publican algo que desestabilice la sociedad. Por eso, gran parte de la censura hoy es auto censura.

¿Cómo imagina el futuro de Internet en China?

Es difícil predecir eso. A pesar del estricto control en redes sociales y a la falta de libertad de expresión en línea, me mantengo optimista. Espero que los líderes puedan encontrar la manera de gradualmente transformar Internet en un espacio abierto, así solo sea por razones económicas o para competir con compañías extranjeras.


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